Dios mío y Señor Jesús mío, al levantarme me he quedado contemplando el sol y toda la belleza de nuestra naturaleza.
Tomo conciencia de la perfección de todo este sistema de vida que Tú has creado.
Me alegro de sentirme vivo(a), y de saber que Tú un día, en la eternidad, me pensaste y me creaste para que yo pudiera alabarte y bendecirte con mis palabras y con mis acciones.
Señor, en este momento quiero entregarme totalmente a Ti y pedirte que me des fuerza, paz, amor y salud para hacer de mi vida una oda de alabanza a tu Nombre.
No permitas, Señor, que yo te defraude con mis comportamientos. No permitas que mis acciones y pensamientos sean contrarios a tu voluntad. Déjame, Dios vivo y verdadero, luchar y conquistar la felicidad y la plenitud que busco y necesito.
Quiero sentirme protegido(a) por Ti y saber que nada me va a pasar ya que Tú estarás a mi lado.
Gracias por el día y en él por todo lo que voy a conseguir.
Amén, Amén, Amén.
Padre Dios, te suplico que bendigas a este hermano(a) que me lee y le hagas comprender que se hace tu Voluntad y que eso es lo mejor para su bien. Amén.
Miguel Nouel