Para los hijos varones la figura materna es algo muy importante. El vínculo que se da entre madre e hijo es uno de los más preciados y especiales que una mujer pueda disfrutar. Cuando los hijos crecen y comienzan a poner su atención en «otras chicas» la mamá puede comenzar a experimentar algo parecido a los celos y se vuelve dominante posesiva. Entonces aparece la idea de «no hay una mujer perfecta para mi hijo».
Si no quieres llegar a convertirte en la horrible suegra de los chistes, hay que ir un paso adelante pues finalmente un día llegará otra mujer a quien él amará con todo su corazón. Para no perder la relación con tu hijo una vez que se case, sino mejorarla y crear una buena relación con tu futura nuera, es necesario que tu hijo sepa de tu boca estas cosas:
– Tú amas a tu hijo tal y como es, por lo tanto, vas a amar todo aquello que él ame y eso implica estar decidida a amar a la mujer que él elija para ser su esposa, además de verla como tu hija amada, la cuidarás y protegerás como tal.
– Tú siempre serás su mamá y muchas veces serás lo más parecido a su mejor amigo. Esto es, que puede confiar en ti, que lo escucharás pero siempre pensarás primero en el bienestar de tu nuera y tus nietos antes que el bienestar de tu propio hijo; que lo amas muchísimo, pero que una vez que sea un hombre casado, su lugar será su casa, no la tuya.
– Que la mujer más importante en su vida es su esposa y no su mamá. Sus visitas y sus llamadas te hacen y te harán muy feliz, pero que amarás mucho más las visitas con los nietos y la familia completa a casa.
– Voy a respetar tu espacio, tu independencia y a tu familia.
En mi casa no puedes hablar mal de tu esposa o tus hijos; no voy a opinar ni a favor ni en contra; no me voy a poner de tu lado ni voy a interferir en sus asuntos; no me pidas que oculte cosas a tu esposa, que le mienta y pierda su confianza.
Hace algunos años un viejo amigo y su esposa nos contaban de las cosas que les habían ayudado a establecerse y fortalecer su matrimonio. Este buen hombre mencionó que cuando él le mostró orgulloso a su madre el anillo de compromiso que había comprado para su novia, la madre le dijo: «ella se merece algo mucho mejor que esto, tú puedes esforzarte un poco más por ella» así que el joven devolvió el anillo y trabajó aún más hasta obtener un anillo digno de su esposa. Cada vez que él le contaba su madre de alguna dificultad en el matrimonio o en la vida, su madre le decía lo mismo: «tú puedes esforzarte un poco más por ella» y así lo ha hecho todos los días desde entonces. Cuando esa buena mujer falleció, dejó en herencia su propio anillo de compromiso a su nuera junto con las palabras: «Gracias por haber hecho de mi hijo un hombre bueno y feliz».
-La buena influencia de una madre en sus hijos varones ayudará a que no sólo él, sino sus hijos y esposas sean felices, fortalecerá lazos y mantendrá generaciones unidas. Sé más inteligente y ve un paso adelante resguardando el amor.
Fuente: familias.com