
Si cuando converses conmigo repito y repito la misma historia que tú conoces de sobra como termina, no me interrumpas y escúchame. Cuando eras pequeño, para que te durmieras tuve que contarte miles de veces el mismo cuento hasta que cerraras tus ojitos.
Cuando en algún tiempo mientras conversamos me llegue a olvidar del tema del que estamos hablando, dame todo el tiempo que sea necesario hasta que yo recuerde y si no puedo hacerlo no te burles de mí. Tal vez no era importante lo que hablaba pero a mí me bastaba con que sólo me escucharas ese momento.
Si alguna vez ya noquiero comer, no me insistas. Sé cuánto puedo hacer y cuánto no debo hacer. También comprende que con el paso del tiempo ya no tengo dientes para morder ni gusto para sentir.
Cuando me falten mis piernas por estar cansadas para andar, dame una mano tierna para apoyarme, como lo hice yo cuando comenzaste a caminar con tus débiles piernecitas.
Por último, cuando algun día me oigas decir que ya no quiero vivir y solo desearía morir, no te enfades. algun día entenderás que ésto no tiene nada que ver con tu cariño ni con cuánto te amo. Trata de comprender que ya no vivo sino sobrevivo y eso no es vivir. Siempre quise lo mejor para ti y he preparado los caminos que has debido recorrer. Piensa entonces que con el paso que me adelanto a dar estaré construyendo para ti otra ruta en otro tiempo, pero siempre contigo.
No te sientas triste o impotente por verme como me ves. dame tu corazón, compréndeme y apóyame como yo lo hice cuando empezaste a vivir...de la misma manera como te he acompañado en tu sendero te ruego me acompañes a terminar el mío. dame amor y paciencia que yo te devolveré gratitud y sonrisas con el inmenso amor que tengo por ti.
Desconozco el autor