Oh San José, cuya protección es tan grande, tan fuerte y tan inmediata ante el trono de Dios, a ti confío todas mis intenciones y deseos.

Ayúdame, San José, con tu poderosa intercesión, a obtener todas las bendiciones que necesito, por intercesión de tu Hijo Adoptivo Jesucristo Nuestro Señor, de modo que al confiarme aquí en la tierra a tu poder celestial, te tribute mi agradecimiento y homenaje.

Oh, San José, yo nunca me canso de contemplarte con Jesús adormecido en tus brazos; no me atrevo a acercarme a ti cuando Él descansa junto a tu corazón.

Abrázale en mi nombre, besa por mi Su delicado rostro y pídele que me regrese ese beso cuando exhale yo mi último suspiro. San José, patrono de las almas que parten, ruega por mí.

AMÉN.