Yo te alabo Señor en esta noche. Yo te agradezco por el día que terminó.
Ven a mí, Señor Jesús. Tócame. Toca mi cuerpo. Toca mi mente. Toca mi alma. Envía tu Espíritu Santo a mi mente Señor Jesús, como enviaste tu Espíritu Santo a los Apóstoles. Sáname Señor, como sanaste a todos los enfermos que te buscaron.
Yo te alabo Señor Jesús. Yo te agradezco Señor Jesús por mi vida, mi familia, mis amigos. Yo te venero Señor. Yo te agradezco Señor. Yo te adoro Señor. Yo te amo Señor. Alabado sea el Señor. Alabado sea el Señor.
Perdóname Señor. Perdona mis pecados. Limpia mi mente. Limpia mi imaginación. Limpia mis sentimientos.
Toca mi cólera. Toca mis frustraciones de la vida. Fortaléceme Señor Jesús. Gracias Señor por tocarme como tocaste a Jeramías y a Ezequiel. Gracias Señor por tu toque sanador y por darme tu Santo Espíritu.
Gracias Señor, alabado seas Señor. Gracias Señor. Ven a mí Señor. Quédate conmigo Señor.
Perdona mis pecados. “Perdona los pecados y errores de mi juventud. Perdona a mis padres. Perdona a mis ancestros. Límpiame Señor Jesús. Remueve la esclavitud de mi vida y mi familia.
Santísima Virgen María Milagrosa cuídame en esta noche.
Amén.
Fuente: P. Alexis Gutiérrez